• Inicio
  • Película Tajamar
  • Temas
    • DDHH-Paz territorial-DIH
    • Enfoque de Género
    • Integración y Migración
    • Identidad plural-Cultura
  • Observatorio
  • Eventos
  • NarrativasPazExt
    • Artículos
    • Reportajes & Podcasts
    • Entrevistas
    • Denuncias
  • Nuestro equipo
  • More
    • Inicio
    • Película Tajamar
    • Temas
      • DDHH-Paz territorial-DIH
      • Enfoque de Género
      • Integración y Migración
      • Identidad plural-Cultura
    • Observatorio
    • Eventos
    • NarrativasPazExt
      • Artículos
      • Reportajes & Podcasts
      • Entrevistas
      • Denuncias
    • Nuestro equipo
  • Inicio
  • Película Tajamar
  • Temas
    • DDHH-Paz territorial-DIH
    • Enfoque de Género
    • Integración y Migración
    • Identidad plural-Cultura
  • Observatorio
  • Eventos
  • NarrativasPazExt
    • Artículos
    • Reportajes & Podcasts
    • Entrevistas
    • Denuncias
  • Nuestro equipo

Entrevistas

ENTREVISTA REALIZADA A BORIS GUEVARA, PROTAGONISTA DEL DOCUMENTAL: LA NIEBLA DE LA PAZ

  

LA NIEBLA DE LA PAZ

Entre los años 2012 al 2016 se adelantó un proceso de paz entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia FARC-EP, que llevó a la finalización, tras 60 años de guerra, del conflicto armado con la guerrilla mas antigua de América Latina. En el marco de dicho proceso, se inició la producción de la película-documental “La Niebla de la Paz” (https://laniebladelapaz.com/index.html), en la que participaron como protagonistas y parte de la producción, dos exguerrilleros de las FARC-EP.

A propósito de la presentación del documental en Suiza, Paz Extraterritorial tuvo la oportunidad de dialogar con Boris Guevara, excombatiente de las FARC-EP, protagonista, camarógrafo y co-productor del filme. 

Paz Extraterritorial (PE): ¿Quién era Boris Guevara dentro de las Farc?

Boris Guevara (BG): Boris Guevara fue parte de una de las últimas generaciones de jóvenes colombianos que ingresaron a la guerrilla de las FARC-EP ya iniciado el siglo XXI, como consecuencia de la falta de oportunidades para el progresos social y económico en los campos y ciudades. En este sentido, Boris simplemente era un joven citadino inconforme ante la falta de oportunidades que ofrecían el Estado y la sociedad de Colombia, que se identificó con la guerrilla en su anhelo por cambiar el poder injusto y violento que históricamente ha gobernado al país, encontrándole así un horizonte político a su rebeldía.

Dentro de las FARC-EP Boris fue un guerrillero de base al cual siempre le encantó el tema de las comunicaciones, motivo por lo cual siempre buscó aportar en el mejoramiento de éste dentro de la organización revolucionaria.

PE: ¿Cómo llegó a ser camarógrafo Boris Guevara?

BG: fue un proceso bastante complejo dadas las circunstancias de guerra en las que vivíamos, y al mismo tiempo algo que, viéndolo ahora con el pasar del tiempo, parece contradictorio, si entendemos la comunicación también como una forma de retratar las causas y los motivos por los cuales se fundan los movimientos o las organizaciones. Pues en nuestro caso, por motivos de seguridad no podíamos mostrar nuestros rostros a través de videos o fotografías, viéndonos obligados entonces a tener que recrearnos siempre como una reivindicación de las luchas del pasado. 

Entonces, los cursos de comunicación y para camarógrafos estaban enfocados en la guerra, restringiéndolos solo a la propaganda de las acciones militares, y el proceso de transformación de esa visión restringida de la cámara y la comunicación, hacia una visión que permitiera utilizarlas como herramientas para recrear y divulgar la cultura “fariana”[1], fue lento y difícil. 

PE: ¿Cómo surgió la idea del documental "La niebla de la Paz"?

BG: la idea surge en el marco del proceso de paz y de la reincorporación de los excombatientes, como una posibilidad de aportar a la memoria histórica del país y de contarnos de otra manera, sin máscaras, dejando de lado la clandestinidad. Con la firma del acuerdo de paz y la dejación de las armas, la comunicación cambia, tiene rostro, personas reales con historias humanas detrás de ellas, que develan los misterios de una organización demonizada por los medios masivos de comunicación. 

Así, estando aún en La Habana-Cuba, pensamos que era necesario producir un documental que diera cuenta de la visión de los guerrilleros de base, aquellos que generalmente suelen estar invisibilizados por la memoria histórica y que, cuando mucho, solo alcanzan a ser una cifra en los datos de la confrontación.  

PE: ¿Cuál fue el principal problema para la producción del documental?

BG: uno de los principales problemas fue la falta de apoyo de los comandantes, quienes desconfiaban de nuestra capacidad de hacer productos comunicacionales por nuestra propia cuenta. Así mismo, el hermetismo que ha caracterizado al movimiento impide que se puedan divulgar relatos muy interesantes de nuestra memoria histórica. Por otra parte, el financiamiento para su realización fue un gran problema, pues un documental que ofrece el punto de vista insurgente no resulta muy llamativo para muchas fuentes de financiación.

Finalmente, el tiempo fue otro problema importante por dos razones. Por una parte, la cantidad de material audiovisual del que se disponía después de más de 60 años de confrontación, es realmente inconmensurable; lo que puede ser una ventaja, pero a su vez hizo sumamente difícil el ejercicio de edición. Por otra parte, el hecho de estar relatando las memorias de una historia viva, que sigue en desarrollo cada día, hizo también muy difícil encontrar el momento del corte final; dados los cambios socio-políticos que se han venido generando con el proceso de paz y las dificultades del proceso de reincorporación de los excombatientes.  

PE: ¿Cuál ha sido el principal problema para su divulgación?

BG: el principal problema para la divulgación del documental, aparte de su carácter político, es la escasez de apoyo en Colombia para la promoción y fomento del cine colombiano, siendo los fondos y medios de divulgación muy limitados, lo que genera un nivel de competencia agresivo en el que regularmente terminan ganando las productoras cinematográficas que generan productos “rentables” para el mercado, marginando así la visibilización de productos como el nuestro a cinemas culturales de escasa cobertura.

Esta dinámica impide mejorar la valoración del cine-documental colombiano en el público nacional, el cual continúa expuesto a películas que siguen reproduciendo la cultura mafiosa que tanto daño nos hace. Paradójicamente, resulta mejor valorado nuestro trabajo en el exterior, ya sea por su rareza o por sus historias, en todo caso tienen más difusión. 

PE: ¿Por qué vale la pena verse el documental hoy?

BG: el documental “La Niebla de la Paz” tiene una gran reivindicación para el momento histórico que está viviendo Colombia actualmente. Como se sabe, Colombia siempre ha vivido bajo ciclos de violencia socio-política, que se han abierto y cerrado de manera interminable. El proceso de paz con las FARC-EP estuvo signado por el anhelo de millones de colombianos de poner fin al último ciclo de violencia, pero lamentablemente parece que estamos asistiendo a la apertura de un nuevo ciclo violento. 

En este contexto, el documental es un aporte a la memoria histórica de un país sin memoria, porque no se puede hablar de paz en un país que no sabe por qué la guerra, como señala uno de los protagonistas del documental. Este documental le da la posibilidad a quienes lo vean, de tener elementos de juicio para valorar el momento actual de la guerra y la paz en el país, a partir de los errores y aciertos que aportó dicho proceso; y para contribuir, si se quiere, a evitar el escalamiento del conflicto hasta los trágicos niveles que ya hemos padecido. 

Despojados totalmente de una pretensión de verdad; es decir, teniendo claro que se trata de un punto de vista, mediante este documental podemos reafirmar la certeza de que la confrontación armada en Colombia ya no tiene sentido, aunque tenga su justificación.

    

La presente entrevista fue desarrollada por Harold Ordoñez (Como entrevistador); y Boris Guevara (como entrevistado).

[1]Cultura Fariana: la existencia por más de 60 años de las FARC, dio pie al nacimiento de tradiciones, costumbres, música, formas de hablar, comidas típicas, etc., que buscan ser recogidas en la expresión Cultura “fariana”. 

Cartel oficial publicitario del documental LA NIEBLA DE LA PAZ.

Copyright © 2025 Paz extraterritorial - All Rights Reserved.

Powered by

This website uses cookies.

We use cookies to analyze website traffic and optimize your website experience. By accepting our use of cookies, your data will be aggregated with all other user data.

Accept